Alejandro Letelier, titulado de Técnico en Enfermería en Concepción, compartió por qué eligió esta carrera, la que estuvo influenciada por su experiencia personal y el deseo de marcar una diferencia en el sistema de salud.

En 2006, Alejandro tomó la decisión de ingresar al Instituto Profesional Virginio Gómez para estudiar Técnico de Nivel Superior en Enfermería. Esta elección fue motivada por el deseo que nadie más viviera lo que pasó su madre en un centro hospitalario, quien enfrentó un difícil proceso de tratamiento por cáncer de mamas. La experiencia de ella dentro del sistema público lo inspiró a comprometerse y asegurarse de que otros pacientes reciban la atención y el cuidado que merecen. “Mi meta era entrar a un servicio público, poder estar ahí, ser partícipe y llegar más allá de lo que otra gente ha llegado”, comentó. 

Su paso por nuestra casa de estudios le brindó una formación de calidad, además, recibió  un gran apoyo por parte de sus docentes, entregándole no tan sólo una base académica sólida, sino que también lo guió en aspectos prácticos como la elaboración de currículums y la búsqueda de oportunidades laborales, a través de la Red Alumni.

Gracias a la reputación del Instituto Profesional Virginio Gómez y su conexión con la Universidad de Concepción, Alejandro pudo abrirse camino en el exigente mundo laboral de la enfermería. “Hacer la práctica en el Hospital Regional de Concepción, o en establecimientos grandes que hoy existen en la región, fue un plus importante en mi decisión, porque ser parte del trabajo es muy distinto a mirarlo desde afuera”.

Su formación lo llevó a desempeñarse en el Hospital Traumatológico de Concepción, donde actualmente trabaja en la unidad crítica relacionada con traumatología. Sin embargo, su compromiso va más allá de su trabajo diario, ya que Alejandro continúa actualizándose académicamente, cursando diplomados y participando en capacitaciones para mejorar sus habilidades y conocimientos. Además, está involucrado en iniciativas de docencia dentro del Hospital, buscando innovar y contribuir al desarrollo de la educación en traumatología a nivel país. 

“Desde que salí, en el año 2009, a la actualidad, por lo menos han pasado unos tres o cuatro cambios en las normativas de salud, así que tengo que estar constantemente actualizando mis conocimientos”, afirmó. 

Para aquellos que consideran seguir una carrera como Técnico en Enfermería, Alejandro ofrece un mensaje claro: “Esta carrera es una opción que permite estar directamente involucrado con los pacientes y brindar un servicio vital para la comunidad. Mi experiencia durante la pandemia me demostró la importancia y el valor de los Técnicos en Enfermería, quienes continúan siendo una pieza fundamental en el sistema de salud, mostrando dedicación y sacrificio en todo momento”, finalizó.