Con el objetivo de seleccionar ideas innovadores con alto potencial de crecimiento, se realizó la 5ta versión del Desafío High Tech de la UdeC. Concurso que por primera vez extendió su convocatoria a todos los jóvenes de la región del Biobío provenientes de cualquier Casa de Estudios.

VERMIHUMEDAL, es el nombre de uno de los cuatro proyectos ganadores de esta versión, idea que fue desarrollada por Cinthia Méndez y Omar Muñoz, estudiantes de primer año de Técnico en Mediambiente del Instituto Profesional Virginio Gómez; en conjunto con la docente Dra. Ana Araneda.

La idea del proyecto era confeccionar un producto y a su vez entregar un servicio a las personas o familias que viven en zonas rurales y aisladas. Superando la escasez hídrica a través de la reutilización de aguas grises domesticas para el riego de suelos productivos. Es así como incluye un sistema modular de tratamientos biológicos que corresponden a la fusión de un sistema percolador lombrifiltro y un humedal artificial subsuperficial de flujo horizontal.

“Surgió la oportunidad de crear un proyecto medioambiental y ya tenía en la cabeza una idea de proyecto e invité a dos alumnos de la carrera para que participaran en el Desafío High Tech. Les dije en un principio a los chiquillos que probablemente no ganemos pero, ese no es el fin, sino que tener la oportunidad de participar”, indica la Dra. Araneda respecto a sus expectativas y formulación del proyecto.

Por su parte Cinthia Méndez señala que “encontré que era una excelente oportunidad para aprender y me sumé”. Además relata que el trabajo de formular el proyecto requirió gran constancia por parte de todo el equipo, ya que durante tres meses fueron entrenados en diferentes áreas para cumplir el objetivo de la creación de un nuevo negocio de base tecnológica con alto impacto social.

Fue así como 173 jóvenes emprendedores participaron en el concurso a nivel regional, de los cuales sólo 13 proyectos pasaron a la final. “En la última presentación tuvimos que realizar una exposición de 3 minutos, incluyendo todos los elementos que nos habían enseñado. Además tuvimos que enfrentarnos a la ronda de preguntas de los expertos…pero, pese a la dificultad lo logramos”, afirma Cinthia.

En este sentido la docente indica que la idea era poder solucionar los problemas de sequía mediante la reutilización del agua. “Es así como nuestro prototipo fusiona dos sistemas que ya existen, uno que es de planta especializada en absorción de nutrientes de aguas residuales y el otro sustrato que viene con anélido de lombrices de tierra. En el fondo presentamos un problema que afecta a gran parte de nuestro país y entregamos una solución real para revertir esto”.

Por último Omar Muñoz, relata que nunca había tenido la oportunidad de trabajar en un proyecto de este tipo, por lo que agradeció la instancia de complementar su formación académica. “A mis compañeros me gustaría decirles que si tienen la oportunidad de participar en algo así no lo desaprovechen. El hecho de conocer cómo se desarrolla un proyecto, compartir con otras personas, poder crear redes de contacto que al futuro pueden ser muy importante para la vida laboral, es algo que hay que aprovechar sí o sí”.