La sana convivencia: reflejo del respeto y los valores institucionales
El concepto de convivencia es un elemento transversal para los distintos estamentos de cualquier institución de educación superior. La propia Comisión Nacional de Acreditación (CNA) contiene entre sus criterios y estándares de calidad la gestión de la convivencia, equidad de género, diversidad e inclusión.
En nuestro Instituto, existe una Política Integral de Equidad de Género, la cual establece compromisos sobre la implementación de distintas acciones para promoverla; permitiendo así iniciar, sostener y evaluar ajustes y cambios tanto organizacionales como académicos, procurando realizar prácticas para fomentar buenos tratos y sana convivencia, promoviendo un ambiente libre de acoso sexual, violencia y discriminación de género.
La Unidad de Cumplimiento del IP Virginio Gómez, ha propuesto algunas acciones en esta materia: Definir y reforzar lineamientos internos ante situaciones de convivencia previas a procesos de denuncia e investigación y la elaboración de un plan de gestión de convivencia para los tres estamentos en colaboración con áreas internas e instituciones externas, contando con presencia en las tres sedes.
Vania Rodríguez Fuentealba, Jefa del Departamento de Equidad de Género y Diversidad de nuestro Instituto, destacó la relevancia del concepto de convivencia en nuestra comunidad educativa. “La convivencia debe ser un reflejo del respeto y valoración hacia la diversidad que nos rodea. Valorar la diversidad nos permite convivir en una institución segura, respetuosa, justa, equitativa y colaborativa, donde cada persona puede alcanzar su máximo potencial, contribuyendo a un ambiente en donde todos se sientan parte", afirmó.
Otro documento que promueve la convivencia entre toda la comunidad del IP Virginio Gómez es el Modelo de Prevención del Acoso Sexual, la Violencia y la Discriminación de Género, donde se destaca que: “El Instituto Profesional Virginio Gómez vela por las relaciones de respeto al interior de su comunidad, procurando la generación de un ambiente laboral y educativo de tolerancia y sana convivencia entre todas y todos sus integrantes, destacando la promoción de relaciones respetuosas e igualitarias en la comunidad educativa”.
Este modelo busca la promoción del buen trato y relaciones igualitarias en la comunidad educativa del IPVG, erradicando la violencia de género y estableciendo espacios seguros, impulsando así, modelos de convivencia en los que se refuerce la dignidad, la igualdad sustantiva y el respeto a los derechos humanos.