La capacitación de los nuevos trabajadores de la empresa Arauco, que serán los encargados de mantener el funcionamiento del proyecto MAPA, en el Instituto Profesional Virginio Gómez de la Universidad de Concepción, llegó a su fin. Un periodo que les permitió internalizar los procesos operativos de las nuevas instalaciones y también la mentalidad corporativa de su nueva organización da paso a una segunda etapa, directamente en la planta Nueva Aldea, en la que podrán  familiarizarse en terreno con todo lo aprendido hasta ahora.

Una innovación al programa inicial fue la inclusión de capacitación, directamente en una Estación de Monitoreo, instalada en el Virginio Gómez, que es lo más moderno que tiene ABB y permitió acercar a los profesionales a este equipo y luego, en grupos más pequeños, se hicieron simulaciones de los procesos de la planta, en este caso, específicamente de la planta de efluentes.

Héctor Aravena, Gerente del Proyecto Mapa, señaló que “todo este primer periodo que hemos vivido en el Virginio Gómez ha sido de una importancia muy relevante…nuestra gente está muy contenta con lo que ha vivido acá, se han sentido muy acogidos, han sentido que las instalaciones aquí son de primer nivel y apoyados por docentes que también son de primer nivel, por lo cual no queda más que agradecer al Virginio Gómez por todo el apoyo que nos ha dado y obviamente que han sido parte muy importante del éxito que hemos logrado en toda esta primera fase”. 

Por su parte, René Lagos, rector del IPVG, destacó que “como institución de educación superior estamos orgullosos de esta alianza con la empresa Arauco, que nos permitió participar del proceso formativo de los profesionales que estarán a cargo de la operación del proyecto MAPA. Esto viene a ratificar nuestro compromiso con el desarrollo regional. Ahora, ya pasan a una segunda etapa de perfeccionamiento directamente en la planta que esperamos que sea igualmente exitoso. Nuestras felicitaciones y deseos de éxito a Empresa Arauco en la concreción de este proyecto”, comentó. 

Parte importante de este proceso son los trabajadores que han podido vivir esta experiencia única en el país y se apronta a trabajar en la planta de celulosa más moderna del mundo. El ingeniero mecánico, Jonathan Pincheira, parte de este grupo de nuevos empleados de Arauco detalló que está “feliz, contento y con ganas de seguir dándolo todo. Los profesores se adaptaron súper bien para lo que nosotros necesitábamos para seguir avanzando en esta etapa, el Virginio tiene un muy buen nivel en todo sentido”.

Al otro lado de la vereda,  Gabriela Morales Ortiz, Ingeniera Eléctrica recién titulada y una de las solo tres operadoras de planta – las primeras en Chile- recalcó su satisfacción por este proceso. “Es mi primer trabajo, y si debo evaluar esta experiencia le pondría un 7 por la posibilidad de aprender antes de ir a planta. Fuimos súper bien acogidas, nos sentimos integradas y la relación con nuestros compañeros fue muy buena”, especificó. 

Cabe señalar que la modalidad implementada en esta oportunidad no solo es innovadora por hacer contratación de los trabajadores dos años antes de su puesta en marcha, si no, por representar un modelo académico distinto que les permitiera acercarse fácilmente a la práctica operativa de la segunda etapa. Con este fin, el Instituto Virginio Gómez y Empresa Arauco trabajaron en conjunto para ofrecer una modalidad que se ajustara a las necesidades específicas de la futura operación y de los nuevos trabajadores.